lunes

dos veces 2

Hoy me dejó mi amiga más entusiasta, luego de tres años de estar juntos o, mejor dicho, vernos. Al principio estuvimos siete años, o algo por el estilo, en medio de una relación formal. Luego, distintas cosas nos llevaron por lugares distintos, parejas distintas y vidas separadas, hasta que un día apareció nuevamente en mi vida; eligió la ciudad donde yo estaba, un trabajo cerca al mío -fruto de la casualidad- y dejó su pareja. Ahí comenzó esta larga historia donde cada uno iba por su lado pero, en algún momento, nuestras vidas pendulares volvían al mismo lugar, una especie de triángulo de las Bermudas donde siempre caíamos cada algún lapso de tiempo, a pesar de relaciones y otros inconvenientes por el estilo. Hace un año se fue de Buenos Aires, no sin antes preguntarme qué opinaba de su partida; ante cualquier duda mía quizás ella se hubiera quedado, o al menos eso es lo que me dijo. La alenté por el progreso profesional, cómo si de algo sirviera…
Hoy, cuando hace un mes que no sabía nada de ella, que no hablábamos –sólo saludos protocolares por msn- sonó el teléfono. Era ella. Luego del ritual inicial de saludos comenzó a cambiar su voz, no sabía por dónde empezar, se le notaba fácilmente, pero a los tropezones arrancó.

- Necesito hablar, contarte lo que me está pasando. Te amo, pero no puedo seguir así. – No tuve nada que decir, presentía lo que venía.- Sabés que no hay nada en el mundo que quiera más que verte feliz. Lo sabés perfectamente. Hemos sido siempre, más allá de todo y al fin de cuentas, nuestros mejores amigos durante los últimos doce años, pero yo no puedo seguir así, siento que vos conocés el final de la historia y yo no lo sé. Si, ya sé que me lo has explicado varias veces, que no es tu culpa que yo no sepa el final, sino que así no lo puedo o no lo quiero ver. No sé, necesitaba decírtelo, despedirme de alguna manera. Si hay algo que no tengo dudas es que nos queremos bien y por eso esto.
- No tengo dudas de eso – le contesté pero la verdad es que no podía construir una oración más larga, no por estar desbordado por la situación, lamento admitirlo, pero este último tiempo mi cabeza ha estado ocupada con otras cosas, otros abandonos más cercanos, así que, luego de un silencio, culminé mi frase con un suspiro con el solo objetivo de informarle que la comunicación no se había cortado, al menos técnicamente.
Su voz comenzó a ser entrecortada, cambiamos algunos chistes como para digerir la situación y continuó:
- ¿Te acordás que a veces tengo premoniciones? Anoche tuve una, que es lo que ha terminado por aclarar mi mente. Estabas casado, con hijos, y se te veía muy bien; y yo últimamente te siento muy feliz – nunca se destacó por sus cualidades de perceptora- y me parece que ya ha llegado el momento de seguir adelante. Quiero verte bien, y si no es conmigo voy a hacer todo lo posible para que lo logres. Esto me parece un paso adelante.
- Tenés razón – fue mi pobre respuesta.
Ella continuó con sus explicaciones, sólo interrumpidas por afirmaciones o negaciones mecánicas de mi parte.
– Sólo que no quería desaparecer así, sin decirte nada. Necesito un tiempo para recuperarme y después veremos. Pienso que nuestra amistad es lo más importante que tenemos y no quiero que la perdamos.
- También siento lo mismo. Me encantaría que siguiéramos con nuestras charlas de cubas libres, aunque las tengamos en bares y no en dormitorios. – quise hacer un chiste que, como siempre, no se entendió.
- Si, aunque empecemos con café mejor.- Se rió sensualmente y continuó – Bueno, tengo que volver al trabajo.
- Bueno, está bien.
- Ah, me olvidaba, el lunes tengo que ir a dar un curso a Buenos Aires, pero sólo voy por el día. Va a ser en un hotel de Pilar.
- Si invitás el café te voy a ver.
- Dale. Un beso. Te llamo cuando llegue.
- Otro.
Y así fue el día en que me desecharon dos veces, alguien que conozco hace trece años y alguien a quien sólo he visto éste último mes. No es una competencia de sentimientos, una herida cerrada hace mucho tiempo no se compara con un nuevo raspón.
Mis miedos de ser esquizoide bordean lo ridículo.
Blogarama  Bitacoras.com
Sitio certificado por
Adoos
flat 1 bedroom
online kleinanzeigen
Bloggiar Blogs
Vuelos Baratos